El presidente de Argentina, Javier Milei, ha anunciado una controvertida propuesta que busca modificar el Código Penal del país, eliminando la figura del feminicidio.
Esta medida, que busca despenalizar de forma específica los homicidios de mujeres por razones de género, ha generado un intenso debate tanto en Argentina como a nivel internacional.
La iniciativa se presentara en el Congreso cuando reanuden las sesiones en marzo, y se enmarca dentro de un conjunto de reformas que el gobierno de Milei planea impulsar para modificar políticas relacionadas con los derechos de las mujeres y las personas LGBTI+.
Justificación para la reforma
El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, fue el encargado de adelantar la propuesta en un mensaje publicado en redes sociales, donde señaló que “esta administración defiende la igualdad ante la Ley consagrada en nuestra Constitución Nacional. Ninguna vida vale más que otra”.
De acuerdo con Libarona, la propuesta tiene como objetivo garantizar que todos los ciudadanos, independientemente de su sexo, se traten de manera igualitaria ante la ley.
La eliminación de la figura del feminicidio se anuncio tras un polémico discurso de Milei en el Foro Económico Mundial en Davos, donde el mandatario argentino calificó a lo que denomina “ideología de género” como una distorsión del concepto de igualdad.
Para el presidente, el feminismo y la diversidad de género son instrumentos que buscan justificar el avance del Estado sobre las libertades individuales.
Implicaciones de la eliminación del feminicidio
El feminicidio lo incorporaron al Código Penal argentino en 2012, en respuesta a una alarmante ola de asesinatos de mujeres a manos de hombres.
Esta figura legal aumentaba las penas para los homicidios perpetrados por razones de género, proporcionando una respuesta más severa a los crímenes de odio basados en la condición femenina.
De esta forma, Argentina se unió a otros países de la región en reconocer y penalizar específicamente los crímenes de odio contra las mujeres, travestis y personas trans.
La eliminación de esta figura podría tener repercusiones negativas sobre los esfuerzos en la lucha contra la violencia de género, un tema que sigue siendo una preocupación clave en el país.
Organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación, argumentando que esta reforma puede debilitar las políticas de protección y asistencia a las víctimas.
El contexto político y el impacto internacional
La propuesta de Milei también se da en un contexto político más amplio. En el escenario internacional, la postura del presidente argentino parece alinearse con la de otros líderes conservadores, como el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Tras asumir el cargo, Trump firmó una orden ejecutiva para eliminar los programas federales de diversidad e inclusión, calificándolos de discriminatorios. De manera similar, Milei ha criticado las políticas de igualdad de género, sosteniendo que son un intento de imponer una agenda que va en contra de los principios de libertad individual.
Aunque el proyecto aún no ha sido formalizado en el Congreso, se espera que cause una fuerte resistencia dentro de la sociedad argentina, que en los últimos años ha logrado importantes avances en términos de derechos de las mujeres y personas LGBTI+, incluyendo la legalización del aborto y la ley de identidad de género.
