Lima, 23 jul (EFE).- La manifestación antigubernamental que se realizó este sábado en el centro histórico de Lima dejó, al menos, dos personas detenidas y un agente antidisturbios herido, informó el comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), Jorge Angulo.
El jefe policial señaló a la emisora RPP que uno de los detenidos fue acusado de lanzar unos explosivos que hirieron al agente y la otra persona de hacer pintadas en la sede del Palacio de Justicia.
«Lamentablemente no sé quién le habrá aconsejado o en qué circunstancias el sujeto trató de lanzar unos explosivos pequeños», declaró Ángulo antes de asegurar que el ataque fue filmado por las cámaras de seguridad instaladas en la zona.
El Ministerio Público informó que las Fiscalías Penales de Lima Centro realizaron diligencias en las comisarías «para garantizar la legalidad de las intervenciones y detenciones en flagrancia de ciudadanos que habrían cometido actos ilícitos en las manifestaciones».
La nueva marcha antigubernamental convocada este sábado en Lima reunió a centenares de personas y se desarrolló de manera pacífica en gran parte de su recorrido, hasta que se produjo un enfrentamiento con la Policía, que desalojó a manifestantes que ingresaron a la céntrica plaza San Martín.
A diferencia de la jornada de protesta que concentró a miles de personas durante la tarde y noche del miércoles pasado, la convocatoria de la Coordinadora Nacional Unitaria de Lucha (CNUL) fue respondida este sábado en su mayoría por personas que han llegado desde el interior del país hasta Lima para expresar su rechazo a las autoridades del Ejecutivo y Legislativo.
Los manifestantes se reunieron en la plaza Dos de Mayo y desde ahí iniciaron una marcha por calles y avenidas céntricas para reiterar su pedido de renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso y la convocatoria a elecciones generales y a una asamblea constituyente.
La manifestación fue seguida de cerca por agentes antidisturbios de la PNP, sin que se produzcan incidentes hasta que un grupo de personas, gran parte de ellas mujeres llegadas desde Puno, ingresó a la plaza San Martín, que hace unos meses fue declarada «zona intangible» por la municipalidad metropolitana.
En ese momento, los agentes lanzaron gases lacrimógenos, lanzaron golpes con sus varas y escudos e hicieron retroceder a los manifestantes, que tuvieron que abandonar el lugar junto con los periodistas y curiosos que seguían los incidentes.
La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH) afirmó que se trató de una «represión injustificada contra la población que ingresó a la plaza San Martín a expresar su rechazo contra el régimen de Boluarte» y reclamó que «la ciudadanía tiene el derecho de usar las plaza públicas para hacer oír su voz».
Previamente, la Defensoría del Pueblo informó que había constatado que una persona que se dirigía a la protesta fue detenida en el distrito de San Martín de Porres y recordó que «el registro policial solo es admisible si existe motivo fundado de que la persona pueda estar vinculada a la comisión de un delito».
Tras el enfrentamiento en la plaza San Martín, los manifestantes reiniciaron su recorrido y avanzaron hacia el Paseo de los Héroes Navales, donde se encuentra el Palacio de Justicia, de donde también fueron desalojados por agentes antidisturbios. EFE