Un joven de 18 años de origen africano, es acusado de violar una mujer con una escoba, tras una atroz golpiza, el pasado viernes 4 de agosto, día en que dicen que irrumpió en una casa de la ciudad francesa de Cherbourg-en-Contentin.
Según contó la víctima, una mujer de 29 años, el agresor había entrado en su domicilio media hora antes, para golpearla en la cara y en el cuerpo y violarla en repetidas ocasiones con el palo de una escoba.
El acusado responde al nombre de Oumar Ndiaye. Los hechos sucedieron en horas de la madrugada, cuando los agentes intervinieron en el domicilio de la víctima, en el centro de la ciudad. Desnuda y en estado de shock, comunicó que la habían golpeado y violado en su casa, tal y como cuenta Le Figaro.
La joven fue rápidamente hospitalizada. Los médicos le diagnosticaron perforación de colon, intestino delgado, peritoneo y diafragma, neumotórax, fracturas costales y alto riesgo de shock séptico. Según cuenta France Bleu, varios enfermeros del hospital quedaron conmocionados por el estado de la víctima y se echaron a llorar.
Las investigaciones de la escena del crimen lograron hallar en la puerta del domicilio las huellas dactilares del agresor. El archivo permitió asignar las huellas a un individuo: Oumar Ndiaye, un joven de 18 años de origen africano con varios antecedentes.
Detuvieron a Ndiaye el 10 de agosto en la casa de su madre. Primero negó los hechos, pero posteriormente los acabó reconociendo. El joven ha sido acusado de «violación acompañada de tortura o actos de barbarie».
DELITOS ANTERIORES DE OUMAR NDIAYE
El tribunal de menores ya habían condenado a este joven en cinco ocasiones anteriores, por daños a la propiedad y violencia, tal y como ha manifestado la Fiscalía de Coutances en una nota de prensa. Ndiaye tiene 17 entradas en el expediente de procesamiento de antecedentes penales. Entre ellos, se incluyen actos de robo, rebelión o agresión incestuosa.
Ndiaye, nacido en 2004, había violado en 2019 a una menor de edad en un internado socioeducativo medicalizado. En 2022, intentó también violar a su hermana de 12 años. Por este presunto ataque, citaron ha Oumar a un peritaje psiquiátrico, pero no se presentó, especifica Le Figaro.
«Estamos en un perfil peligroso, no mostró absolutamente ninguna emoción ni empatía por la víctima. Mostró frialdad durante toda la custodia policial», explican agentes a medios franceses.
El suceso ha tenido una gran repercusión en el panorama mediático y político del país. El alcalde de Cherbourg-en-Cotentin, el socialista Benoît Arrivé, ha comunicado a través un comunicado de prensa su solidaridad con la víctima, pero no ha querido utilizar las redes sociales: «La única actitud digna de un alcalde, de un dirigente político ante semejante tragedia, es la discreción y la mesura», respondió a un usuario que le increpó su silencio.
Por su parte, el presidente del partido Reconquista, Éric Zemmour, ha reaccionado en redes sociales a la noticia deseando la llegada de «una Francia en la que una joven no corra el peligro de acabar en coma después de haber sido robada, violada y horriblemente torturada en su propia casa».