Pocas novedades hubo ayer en el Día Mundial del Donante de Sangre, salvo el propósito de Salud Pública de captar cinco mil nuevos donantes, la reiteración del Servicio Nacional de Salud de que tiene cobertura para adquirir sangre y sus derivados, algunas estadísticas actualizadas del Hemocentro Nacional y las siempre oportunas orientaciones del Club de Donantes de la PUCMM sobre los temores, mitos y creencias en torno a la donación de sangre.
Este año, el lema de la campaña internacional es “Dona sangre, dona plasma, comparte la vida, compártela frecuentemente”, que se enfoca en los pacientes que precisan transfusiones de por vida, pero también subraya el papel que todos podemos desempeñar mediante la donación de sangre o de plasma.
Una de las más graves dificultades que se presentan cuando un paciente necesita una transfusión es que sea portador de un grupo sanguíneo escaso en la región o en el país donde este vive, aunque son cada vez más raros los casos en que esa dificultad no se pueda solucionar.
El otro problema, quizás el más importante, es la poca predisposición de la mayoría de las personas a donar sangre de manera voluntaria, de ahí que tanto la Cruz Roja como otras organizaciones realicen campañas periódicas para incentivar la donación.
Cualquier persona puede donar sangre, siempre que tenga entre 18 y 65 años y un peso mínimo de 110 libras, en el caso de las mujeres, no estar embarazada o amamantado, no haber padecido ciertas enfermedades como Hepatitis B, tipo C, VIH-sida, sífilis, y no haber recibido trasplantes de órganos.
Donar sangre pareciera fácil de entender, así como se explica, pero en muchos países subdesarrollados el suministro, con los estándares de seguridad requeridos para evitar el contagio del sida o de otras patologías, no es tan accesible, sobre todo para las poblaciones vulnerables.
Si la donación de sangre tiene tal trascendencia, debemos apoyar las campañas para incentivar a todas las personas que lo puedan hacer a que se sumen a este acto voluntario que contribuye a la preservación de la vida.
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