Vergüenza le debiera dar a la Cancillería dominicana por mentir acerca de la decisión del ayuntamiento de Madrid que ordena el desalojo de la oficina consular, para en cambio decir que de lo que se trata es de una mudanza “voluntaria” y “armoniosa” para ofrecer a los usuarios mejores atenciones y servicios.
Incurre en un mayor descaro cuando trata de desmentir a este diario y justificar el cambio de sede dizque por “la alta demanda”, y hacerlo luego de que el embajador en España, Juan Bolívar Díaz, confirmara que, efectivamente, “hay una resolución municipal… del ente que se encarga de verificar los problemas concernientes a condominios”.
Fue más lejos nuestro embajador al referir que es un conflicto heredado: “El consulado no se defendió a tiempo, debidamente, eso no quiere decir que a lo mejor no se le hubiera pedido de todas formas que se mudara porque el problema era que había demasiada gente en ese consulado”.
Inclusive, periodista al fin, Juan Bolívar le da el contexto al hecho y describe otra realidad del Servicio Exterior, como la del personal supernumerario. “Demasiada gente trabajaba ahí y ahí no cabe toda esa gente, lo que es peor porque si no tenían trabajo entonces merodeaban”. Informa que de 50 empleados actualmente en el consulado laboran 14. Igual reducción se habría producido en la Embajada.
De eso se trata. La orden de desalojo es el resultado de una querella por las constantes quejas de residentes e inquilinos del edificio donde funciona el consulado y otras dependencias dominicanas en la avenida Paseo de la Castellana #128, caso de la Junta Central Electoral, que también está buscando “casa” propia.
No solo trata de confundir a la opinión pública la Cancillería, sino que exhibe un comportamiento nada transparente porque antes se negó a confirmar o negar a este diario que tal disposición del ayuntamiento de Madrid existía, ante nuestro vano intento de, en ejercicio de buen periodismo, contrastar la información y darle oportunidad de que alegara. Pero luego, de manera poco noble, pretende desmentirnos.
¿A santo de qué quiso ocultar y manipular el hecho concreto laCancillería?
Si elCaribe se aventuró a publicar que está en trámite el desalojo de la sede consular en Madrid, aunque se nos negó el acceso a la información, es porque la obtuvo en la propia capital española y la confirmó allí.
Cuando elCaribe decide publicar algo es porque es verdad.